En el estado Bereber de la región suroeste de Marruecos, de la que es endémico, el árbol Argania Spinosa se le conoce como el "árbol de la vida".
HISTORIA DEL ACEITE DE ARGÁN
Se cree que se originó en el pueblo de Argana, este árbol es bien conocido por el aceite curativo, o el "oro líquido", que se deriva de los granos de sus frutos. Históricamente, el pueblo Amazigh en Marruecos usaba el aceite para reducir la aparición de imperfecciones y para tratar problemas reumáticos. Hoy en día, el aceite de Argán sigue siendo un ingrediente respetado y deseable en innumerables productos cosméticos y farmacéuticos naturales.
Ya en 1550 A.C., los fenicios usaban aceite de Argán para curar sus dolencias y embellecerse aplicándolo como acondicionadores para la piel y el cabello y registrando sus métodos de uso. Desde entonces, y durante siglos, los Bereberes del norte de África han tenido fuertes lazos con el árbol de Argán y sus frutos carnosos, los cuales eran consumidos por las cabras nativas. Luego dejarían atrás la nuez dura que contiene el grano rico en aceite. El explorador africano Leo Africanus descubrió el aceite de Argán durante sus viajes por Marruecos en 1510 y, finalmente, el aceite exclusivo y exótico se introdujo en Europa, donde solo la gente pudiente podían permitírselo. En las últimas dos décadas, los secretos de belleza del aceite portador de Argán ha llamado la atención de los científicos, quienes han examinado sus propiedades descubriendo que es rico en componentes, como antioxidantes, que contribuyen a la apariencia de una piel y cabellos sanos y rejuvenecidos.
¿CÓMO SE EXTRAE EL ACEITE DE ARGÁN?
La fruta de Argán es pequeña y tiene forma redonda, ovalada o cónica. Madura y cae del árbol a finales del verano; nunca se recoge de los árboles. Su capa más externa es una cáscara gruesa, que protege la pulpa carnosa que encierra una nuez con una cáscara dura. Esta nuez comprende el 25% del peso de la fruta y contiene hasta tres granos ricos en aceite. Dependiendo del método de extracción, los granos rinden entre 30% y 50% del aceite. Para producir 1 kg de aceite se requieren 30 kg de nueces de Argán.
Históricamente, el aceite de Argán se extraía cuando las cabras trepaban al árbol y comían la fruta, después de lo cual las cáscaras de las frutas ingeridas pasaban por sus tractos digestivos y el grano limpio se recolectaba de los excrementos de las cabras. Este método redujo la cantidad de esfuerzo requerido para la extracción. En la actualidad, el proceso de producción implica una tecnología moderna que simplifica el proceso y es más higiénica; sin embargo, las cooperativas de aceite de argán continúan funcionando a lo largo de la costa nativa de los árboles y las mujeres muelen la fruta a mano para producir el aceite con fines cosméticos y culinarios. La nuez dura también debe romperse a mano con el uso de rocas como herramientas para proteger el "oro líquido" dentro de las cáscaras.
El primer paso en el proceso de extracción de aceite es secar al aire libre la fruta recolectada. Una vez seca, la pulpa carnosa se retira a mano, aunque algunos productores optan por retirar la pulpa mecánicamente sin secar primero la fruta. A continuación, se rompe la nuez de Argán para obtener los granos. Este exigente y lento proceso debe realizarse a mano y con piedras, ya que los intentos de mecanizarlo no han tenido éxito. Las cáscaras de los granos se muelen y se pueden usar como exfoliantes cosméticos. Los granos en sí también se muelen mecánicamente y luego se prensan en frío, lo que da como resultado un puré marrón que exuda aceite puro y sin refinar. Este aceite sin filtrar se transfiere a recipientes y se deja reposar durante aproximadamente dos semanas, tiempo durante el cual los sólidos suspendidos en el aceite se depositan en el fondo. Una vez que estos residuos se han eliminado, El aceite se filtra más para una mayor pureza y claridad.
BENEFICIOS DEL ACEITE DE ARGÁN
Los principales componentes químicos del aceite portador de argán son:
ÁCIDO OLEICO
Mantiene la suavidad, flexibilidad y luminosidad de la piel y el cabello
Estimula el crecimiento de cabello más grueso, más largo y más fuerte
Reduce la apariencia de envejecimiento, como arrugas prematuras y líneas finas
Elimina la caspa y favorece el crecimiento del cabello
Aumenta la inmunidad
Exhibe propiedades antioxidantes
Previene la inflamación, rigidez y dolor de las articulaciones
ÁCIDO LINOLEICO (OMEGA 6):
Hidrata el cabello y promueve su crecimiento
Facilitar la cicatrización de heridas
Exhibe propiedades antiinflamatorias
Calma el acné y reduce las posibilidades de futuros brotes.
Promueve la retención de humedad en la piel y el cabello.
Hace que los aceites se sientan más finos en consistencia cuando se usan en una mezcla de aceites, por lo que son beneficiosos para su uso en pieles propensas al acné
ÁCIDO ESTEÁRICO
Tiene propiedades limpiadoras que eliminan la suciedad, el sudor y el exceso de sebo del cabello y la piel.
Es un agente emulsionante ideal que une agua y aceite.
Ayuda a que los productos sigan siendo potentes cuando se almacenan durante largos períodos de tiempo
Acondiciona y protege el cabello del daño sin disminuir el brillo ni hacerlo sentir pesado
Tiene propiedades limpiadoras excepcionales
Suaviza la piel
ÁCIDO LINOLÉNICO
Disminuye la inflamación
Controla la coagulación de la sangre en la piel
Calma el dolor articular y alivia la rigidez para mejorar la flexibilidad
Es un ácido graso omega-3 esencial
Usado cosméticamente, el aceite de Argán mejora la apariencia y textura de la piel y el cabello con su rico contenido en ácidos grasos y antioxidantes, hidratando, acondicionando y suavizando fácilmente ambos sin dejar un residuo graso. Cuando se aplica sobre la piel, el aceite de Argán la deja con un aspecto más firme, terso y suave al mejorar la elasticidad y reducir la aparición de arrugas. En la piel propensa al acné, el aceite de Argán alivia la inflamación y la irritación al tiempo que reduce la aparición de cicatrices y equilibra la humedad natural y la producción de grasa de la piel. Este aceite es eficaz para disminuir las imperfecciones como las estrías, ya que promueve el crecimiento de piel nueva al tiempo que aumenta su flexibilidad. Cuando se aplica al cabello, el aceite portador de argán controla el encrespamiento, agrega brillo y facilita el manejo y el peinado del cabello, lo que aumenta su atractivo.
El aceite de Argán proporciona un alivio calmante para la piel dañada, así como para las condiciones que la dejan deshidratada, con picazón e irritada. Aplicado a la piel que ha sido sobreexpuesta al sol, el aceite Argán calma las áreas que son dolorosas al tacto, desvanece las manchas solares y facilita la regeneración de una piel más saludable. Sus propiedades antimicrobianas y nutrientes evitan que la piel se agrave aún más. Adicionalmente, equilibra el pH de la piel y los niveles de melanina, protegiendo contra la radiación UV del sol y el daño potencial a la piel y el cabello.
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